Estrategia de comunicación exterior
Hay muchas razones por las que las empresas necesitan comunicarse con personas ajenas a su organización. Puede que necesiten enviar información actualizada a los accionistas, o que haya un nuevo portal de clientes en el horizonte que los clientes deban conocer.
La forma en que se gestionan estas comunicaciones corporativas externas puede tener un gran impacto en el funcionamiento de las empresas y en su rentabilidad. Por ejemplo, si no realizan un seguimiento del éxito de cada una de sus formas de marketing de comunicación externa, pueden malgastar dinero en esfuerzos ineficaces de generación de contactos.
En este artículo, responderemos a la pregunta “¿Qué es la comunicación externa?” y exploraremos las ventajas de la comunicación externa y de la gestión y el seguimiento de las campañas. También encontrará una guía paso a paso y un ejemplo de plan de comunicación de marca que le ayudarán a crear su propia estrategia de comunicación externa.
La comunicación externa es el proceso de comunicación con grupos de audiencia externos, que pueden incluir clientes, organizaciones, proveedores o cualquier tercero que no forme parte de la organización que envía la comunicación.
¿Qué es la comunicación externa en la empresa?
Skip to main content 4 min readLa comunicación eficaz es importante para todos y cada uno de los aspectos de una organización, desde cómo interactúan sus empleados entre sí hasta cómo se presenta su marca a los clientes potenciales.
Dado que la comunicación empresarial eficaz permite eliminar silos, mantener informados a los empleados y reducir errores, es esencial para el éxito y el crecimiento de toda organización. Cuatro de cada cinco empleados creen que una comunicación empresarial interna eficaz contribuye a su rendimiento en el trabajo, lo que a su vez ayuda a mejorar los resultados, crear una cultura empresarial más sólida y responder a las necesidades de los clientes.
La comunicación interna es cualquier tipo de mensaje entre las partes de una organización. La comunicación interna puede darse entre dos compañeros de trabajo, varios departamentos de la empresa, un directivo y su subordinado, etc.
La comunicación por correo electrónico es una de las herramientas de comunicación empresarial más utilizadas, pero también una de las más mal utilizadas. Muchos empleados modernos se sienten abrumados por la cantidad de mensajes que llegan a su bandeja de entrada cada día. Una persona media recibe más de 120 correos electrónicos al día. Esto hace que sea fácil pasar por alto un mensaje o perder de vista una información crucial en una cadena interminable de correos electrónicos.
Empresas con buena comunicación externa
La comunicación interna suele ser menos formal, más frecuente y más amplia que la externa. Puede ser de uno a uno o de uno a muchos, y fluir en varias direcciones: de arriba abajo, de abajo arriba u horizontalmente.
Todos los departamentos participan en la comunicación interna, pero el desarrollo de una estrategia es responsabilidad de los equipos de personas o RRHH. El objetivo es eliminar los silos departamentales y conseguir que la información fluya entre los equipos para que puedan trabajar juntos con eficacia.
La comunicación externa suele corresponder a los equipos de marketing, ventas, éxito del cliente o relaciones con los inversores. Suele implicar todo lo relacionado con la marca, el producto, los precios, los resultados, etc. El objetivo suele ser la captación y fidelización de clientes.
Alinear las estrategias de comunicación externa e interna beneficia a su empresa porque garantiza la coherencia de los mensajes, genera confianza, mejora el alcance, construye una cultura de empresa, mejora la alineación estratégica y la organización, y aporta ideas. He aquí cómo:
Además, incluso los empleados que no están de cara al cliente transmiten una imagen al mundo exterior, como cuando hablan con amigos y familiares. Por eso es importante que sus mensajes, su posicionamiento y la forma de presentar su marca estén alineados. Lo mejor de todo es que puede aumentar los ingresos hasta un 20%.
Comunicación externa informal
En una organización, la información puede fluir en cuatro direcciones: descendente, ascendente, horizontal y diagonal. El tamaño, la naturaleza y la estructura de la organización determinan en qué dirección fluye la mayor parte de la información. En las organizaciones más consolidadas y tradicionales, gran parte de la comunicación fluye en dirección vertical -hacia abajo y hacia arriba-. En las empresas informales, como las nuevas empresas tecnológicas, la información tiende a fluir horizontal y diagonalmente. Esto, por supuesto, es una función de la jerarquía organizativa casi plana y de la necesidad de colaboración. Las comunicaciones no oficiales, como las que se transmiten a través de la red de contactos de la empresa, aparecen en ambos tipos de organizaciones.
La comunicación descendente se produce cuando los líderes y directivos de la empresa comparten información con empleados de niveles inferiores. A menos que se solicite como parte del mensaje, los remitentes no suelen esperar (o particularmente no desean) obtener una respuesta. Un ejemplo puede ser el anuncio de un nuevo Director General o de una fusión con un antiguo competidor. Otras formas de comunicación descendente de alto nivel son los discursos, los blogs, los podcasts y los vídeos. Los tipos más comunes de comunicación descendente son las directrices cotidianas de los jefes de departamento o de línea a los empleados. Incluso pueden adoptar la forma de manuales de instrucciones o manuales de empresa.