Cómo evaluar la viabilidad de una idea de negocio
La manía de los tulipanes arrasó los Países Bajos en 1636-1637, y el precio máximo de un solo bulbo de tulipán llegó a multiplicar por 10 el salario anual de una persona. Pero entonces el mercado se desplomó. Y todos los que participaban en el comercio de tulipanes sufrieron pérdidas financieras.
Técnicamente, puedes abrir una tienda online y vender los productos que quieras, dentro de lo razonable. Pero eso no significa que sean los mejores productos para tu beneficio. Vamos a hablar mucho de determinar lo que quiere el mercado y cómo puede llenarlo un producto, así que primero definamos algunos términos importantes.
La viabilidad del mercado se refiere al potencial empresarial de un mercado específico. Un análisis de viabilidad del mercado le ayudará a determinar si tiene sentido, desde el punto de vista financiero, crear una empresa en ese mercado concreto.
Cuanto más capital requiera su nueva empresa, mayor será el riesgo que está asumiendo. Tendrá que apostar los ahorros de toda su vida a su idea de negocio o pedir un préstamo para cubrir los costes de puesta en marcha. En cualquier caso, fracasar significa perder ese dinero, lo que puede arruinar tus finanzas.
Ejemplo de viabilidad empresarial
La viabilidad empresarial significa que una empresa tiene (o puede tener) éxito. Una empresa viable es rentable, lo que significa que ingresa más de lo que gasta en los costes de funcionamiento de la empresa.
Crear una empresa viable es un proceso que consta de dos partes. En primer lugar, significa crear una estrategia de marketing sabiendo quién eres, a quién vendes y quién más les vende. En segundo lugar, significa tener la casa financiera en orden.
La viabilidad empresarial se confunde a menudo con otros dos términos que se suelen utilizar para referirse al rendimiento empresarial: solvencia y liquidez. Una empresa es solvente cuando tiene activos suficientes para cubrir sus pasivos. La solvencia se confunde a menudo con la liquidez, pero no es lo mismo.
La solvencia suele medirse como el coeficiente de solvencia, que es el total de activos corrientes de una empresa dividido por el total de pasivos corrientes. Una empresa debe tener un ratio de solvencia de 2:1 para ser solvente y cubrir sus pasivos, lo que significa que tiene el doble de activos corrientes que de pasivos corrientes. Se necesita el doble de activos que de pasivos porque la venta de activos para obtener efectivo puede dar lugar a pérdidas. Una empresa es solvente y no es probable que se declare en quiebra si su ratio corriente es superior a 2:1.
Viabilidad financiera
Independientemente del tipo de negocio que dirija, necesita un plan de empresa. Un plan de empresa es una descripción de su negocio y sus objetivos, así como las estrategias de cómo espera alcanzar sus metas con un equipo de gestión y recursos financieros. Contrariamente a lo que se cree, no necesita un plan de empresa sólo para obtener financiación. También necesita un plan que le ayude a orientar su empresa.
Dos aspectos que debe tener en cuenta al definir su empresa son la declaración de su posición en el mercado y su propuesta única de venta. Una declaración de posición de marketing es una declaración de una o dos frases que dice lo que haces y para quién lo haces para resolver de forma única una necesidad urgente o satisfacer un deseo. Una propuesta de venta única es una afirmación que muestra al lector en qué destaca su producto o servicio y en qué se diferencia de otros sustitutos del mercado. Su propuesta única de venta debe ser lo suficientemente fuerte como para atraer a los clientes y obligarles a comprar su producto o servicio.
La Agencia Federal para el Desarrollo de la Pequeña Empresa destaca el caso del propietario de una tienda que repara y vende relojes. Tras analizar las operaciones de su negocio, el propietario se dio cuenta de que la mayor parte de sus ingresos procedían de la reparación, a pesar de que la empresa dedicaba la mayor parte de sus recursos a la venta de productos. Como resultado de su análisis, el propietario llegó a la conclusión de que su negocio era una tienda de reparaciones. Cerró la operación de venta de productos y se centró en el servicio de reparaciones. El resultado fue un aumento espectacular de las ventas y los beneficios.
Viable factible y deseable
Una revisión de diseño evalúa el diseño de un nuevo producto para ver si cumple unos criterios específicos. Las partes interesadas quieren saber si tienen una solución innovadora a un problema humano. Según IDEO, un producto verdaderamente innovador debe tener deseabilidad, viabilidad y factibilidad para un crecimiento y éxito sostenibles a largo plazo.
El proceso de pensamiento de diseño implica investigación, o una revisión del diseño, para determinar qué producto y qué características servirán mejor a sus clientes. Una revisión de diseño exitosa identifica un problema que sus competidores no están resolviendo y que beneficiará tanto a sus usuarios finales como a la empresa.
La deseabilidad, viabilidad y factibilidad es una metodología de pensamiento de diseño para poner a prueba ideas, conceptos e hipótesis con el fin de determinar si usted tiene una propuesta de valor única (también conocido como punto de venta único) y si vale la pena llevarla a cabo.
Si no se marcan las tres casillas, aumentan los riesgos, los costes y las posibilidades de fracaso. Se podría decir que la conveniencia, la viabilidad y la factibilidad son una metodología de análisis de riesgos para las ideas, un conjunto de herramientas para encontrar el punto óptimo de innovación.
